Por César Lévano
Abro un paréntesis
Al cabo de diez años de trabajo sin tregua en este diario, inauguro una pausa. En los meses próximos estaré ausente de esta columna más no para descansar. Voy a consagrarme a escribir un libro que será parte fundamental de mi legado: Historia y razón del movimiento obrero peruano. Lo asumo como un deber intelectual y moral.
Mi obligación se acrecienta por el hecho de haber nacido y crecido en un hogar de patriarcas proletarios y por haber a lo largo de mi larga vida reunido material de primera mano sobre esa historia: periódicos, folletos, libros, manuscritos y entrevistas grabadas, memorias.
Desde luego que la tarea que he asumido es prolongación de un esfuerzo historiográfico que empezó hace cerca de medio siglo. De mi historia tenía escritas unas 300 páginas en pruebas de imprenta, y me faltaba tiempo para reanudar la redacción. Una amiga de cuyo nombre no debo acordarme, me sugirió que, a raíz de mi cese en la docencia en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, me consagrara a corregir y completar mi historia. Lanzado a la obra, descubrí que mis viejos originales habrían desaparecido… en mi propia casa.
He empleado infructuosamente semanas en la búsqueda del texto perdido, pero eso ha conducido al hallazgo de documentos escondidos y valiosos.
Me dije entonces: tango que persistes, a la manera de Sísifo, y a lo mejor el esfuerzo será muy grande. Me he planteado, pues, un desafío. Entretanto, todavía no recibo la pensión de 830 soles mensuales –un mendrugo envuelto en un insulto, lo he llamado– ni otros reintegros que San Marcos me adeuda, ni, sobre todo, la compensación por 38 años de servicios como docente. Mi cese se ordenó el 15 de julio del 2017. Supongo que la burocracia sanmarquina está a la espera de que se cumplan los nueves meses para el parto.
Debido a problemas administrativos pensé en renunciar a la dirección del diario, pero al final opté por obtener unos meses de vacaciones. Pienso que en algunos casos escribir la historia es una manera de hacerla.
Publicado en Diario Uno, 2 de abril de 2018.